Hooooola a todo el mundooo..!!
Vais a tener que perdonarme pero con este tiempo tan loco que no se ubica si en primavera u otoño, el frío ha hecho estragos y ando medio griposa con lo que no pude publicar el miércoles y la entrada de hoy será más breve precisamente porque ando recogiendo el moquillo a dos bandas y no sé ni en qué día ando.
Hoy os traigo mi opinión sobre una base de maquillaje de la que llevo oyendo comentarios hace tiempo y me resistía a probarla porque la anterior base que compré de la firma, no me gustó NADA y me prometí a mí misma no volver a comprar una base de maquillaje en KIKO.
Se trata de la LIQUID SKIN SECOND SKIN FOUNDATION y he tenido un debate interno si comprarla o no porque la anterior base de KIKO que compré, fue la CREAM CUSHION y fue un auténtico DESASTRE en cuanto acabado, color, precio, vamos..... de todo. Lo único que me gustaba era la presentación y el innovador método de aplicación con la esponjita de la que salía el producto.
Pues al final me decidí a comprarla aunque es una base que no está indicada especialmente para pieles grasas, así que, ya sé que no la puedo pedir que haga milagros con mis brillos.
Estaba buscando una base para el día a día y no me apetecía tener algo muy pesado, quería una base de cobertura baja, una especie de BB Cream para dar color y unificar tono pero tampoco mucho más.
La estuve probando varias veces en los stands de KIKO y me gustó mucho su textura, es muy líquida, más acuosa que la mayoría de las bases que he probado.
Me llamaba la atención el formato que tenía, como un cuenta gotas y ya os digo que la textura me gustó mucho y cómo se fundía en mi piel. Primero la probé en el dorso de la mano y luego para elegir mi tono, en la mandíbula y ver cómo se fundía con mi piel. Ahí ya me convenció del todo para llevármela a casa porque qué queréis que os diga, lo del envase de cristal a mí no me resulta un inconveniente porque me da seguridad en cuanto a la mejor conservación del producto y además se puede ver la cantidad que va quedando.
Tiene una protección solar de 15 que no está mal para fotografiar porque no saldrá el típico efecto de careta blanca.
Viene en formato de 30 ml y mi tono es el warm beige 30 que es el tono más claro que hay dentro de la gama de los beiges. Os recomiendo siempre si tenéis dudas sobre vuestro tono, si rosado o beige, que tiréis siempre hacia el beige porque es el que mejor camufla las imperfecciones sobre todo si tenéis la piel con tendencia a rojeces o partes más rosadas.
Tiene para elegir entre 14 tonos, desde los beiges, pasando por los rosas y los neutros. Es un punto a su favor porque son bastantes tonos para encontrar el que más os favorezca.
Que queréis que os diga, el formato cuenta gotas me encanta, es una tontería pero me parece que se puede regular más la cantidad de producto que se quiera utilizar.
Además al ser un frasco de cristal, se puede ver la cantidad de base que queda y es como la cosmética que yo utilizo, parece más un producto farmacéutico que uno cosmético.
La fecha de caducidad es de 6 meses, cosa que me sorprendió en este tipo de producto porque las bases suelen aguantar un poco más pero si sois de las que os maquilláis a diario, no vais a tener problema con que caduque antes.
PROS
- Su formato de cuenta gotas me gusta y que sea de cristal para mí no es un inconveniente porque se ve la cantidad que va quedando.
- La textura me parece muy buena y lograda, es muy líquida y se extiende muy bien.
- Los 14 tonos para elegir que ofrecen una amplia variedad para escoger.
- El SPF 15 que lo convierte en una protección media baja y no hace pantalla al fotografiar.
- Se funde muy bien con la piel.
- No transfiere, aguanta muy bien porque la final del día queda producto al desmaquillarme.
- De textura muy ligera y si se quiere más cobertura se puede modular un poco con otra capa.
- Su cobertura media baja que para el día a día me parece muy buena, base ligera.
- Se funde bien con la piel pero deja una capa "extraña en el poro", por lo menos a mí y he probado la aplicación con brocha y con esponja y sigue quedando ese velo.
- El tono está bien y se acerca mucho al mío pero tengo bases que se mimetizan mejor, le falta un punto para que sea como la mía.
- No apta para pieles grasas aunque ya he dicho que no está indicada para ellas.
- Su precio, me sigue pareciendo que KIKO está subiendo mucho los precios en las bases y no me resultan tan buenas como otras firmas incluso de LOW COST. Cuesta 18,50 euros
- La fecha de caducidad me resulta baja, 6 meses cuando una base a ese precio debería aguantar 12 meses.
Ya os digo que todavía la tengo a cuarentena porque no sé si me gusta o no, está claro que en cuanto a bases de maquillaje, KIKO no es mi firma favorita y creo que no le voy a dar más oportunidades porque no veo los resultados que quiero por el precio que pago.
Tengo otras bases más económicas que se me adaptan mejor y otras bases un poco más caras que también lo hacen. Así que, para sombras o barras de labios e incluso perfiladores y rimel , no os digo que no, pero ya no compro ninguna base de maquillaje de KIKO.
Ays, espero que se me pase este contínuo moqueo y sensación de malestar y espero que os guste la entrada porque no sé muy bien lo que he escrito, jajaja.
MUUUUUCHAS GRACIAS por estar ahí y nos vemos en breve, eso espero, y que este destemple desaparezca...
HASTA LA PRÓXIMAAAAAAAA...!!
¡Hola! Esta tarde precisamente he tenido esa base en mis manos y me ha dado buena impresión. La cosa es que no me maquillo a diario y tiene una caducidad muy corta. Y mi gran problema son los poros, habría que verla en acción...Bueno, decirte que me alegra mucho haber dado con tu blog (gracias a mi creciente interés por Kiko) y que me quedo a seguirte. Un beso y que te mejores del resfriado!!!
ResponderEliminarHola Gretel!! Me alegro un montón que dieras con mi blog y que te vayas a quedar, seguro que te gusta y si quieres probar la base, adelante, que a mí no me resulte, no significa que no os valga a vosotras. Muchas gracias por los ánimos, un beso!!
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